La Piazza del Duomo de Pisa o Campo dei Miracoli es la principal atracción turística de esta ciudad toscana. La plaza es uno de los sitios del Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1987, dominada por edificios de gran valor artístico como el Duomo (Catedral de Santa Maria Assunta), el Baptisterio (dedicado a San Juan Bautista), el Campo Santo monumental y la famosa Torre Inclinada (el campanario de la catedral).
UNA JOYA DE LA ARQUITECTURA MEDIEVAL
La plaza situada en la parte norte de la ciudad dentro de las murallas medievales, con sus edificios y su disposición en perspectiva, que amplía el espacio real, representa el centro religioso de la ciudad y una obra maestra de la arquitectura medieval.
Entras en la plaza desde Porta Santa Maria e inmediatamente tienes una vista maravillosa de los principales monumentos que la caracterizan. El contraste entre el verde del prado que rodea los edificios y el blanco de los mármoles que los recubren hacen que el lugar sea realmente espectacular.
EL DOMO
El Duomo, una obra maestra del románico pisano, es el edificio ubicado en el centro de la plaza, con su fachada de mármol llena de columnas, mosaicos de mármol y arcos, llama inmediatamente la atención. Construido entre los siglos XI y XII, tiene un interior de cinco naves, hay obras maestras artísticas como la tumba de Arrigo VI, el púlpito de Giovanni Pisano, mosaicos, pinturas de Cimabue y Andrea del Sarto.
LA TORRE INCLINADA
Justo detrás de la Catedral se encuentra la famosísima Torre Inclinada construida entre los siglos XII y XIV cuya construcción nunca llegó a terminarse debido al hundimiento del terreno que sin embargo decretó su fortuna gracias a la inclinación de la torre.
EL BAPTISTERIO
El Baptisterio es otro espléndido monumento románico de la plaza, también construido entre los siglos XII y XIV, tiene planta circular con cuatro portales, en su interior hay varias obras de arte entre las que destaca un espléndido púlpito de Nicola Pisano.
EL CAMPOSANTO
El monumental Camposanto de Pisa es una joya del arte gótico, construido en el siglo XIII, tiene planta rectangular con pórtico. En el interior hay obras maestras del arte romano que incluyen maravillosos sarcófagos, frescos medievales de artistas como Benozzo Gozzoli, Taddeo Gaddi, Buffalmacco, Spinello Aretino, Andrea di Bonaiuto, Piero Puccio, etc. Desafortunadamente, parte de los frescos en el Camposanto han sido dañados irreparablemente por un bombardeos sufridos durante la Segunda Guerra Mundial.